Baño turco hammam ¿cómo influyen en nuestra salud?

Imagina con los ojos cerrados que estás sentado en un baño turco hammam disfrutando del vapor caliente y un tratamiento de hidroterapia. Pues bien, esto ahora es posible, y para ello no necesariamente tienes que salir de la comodidad de tu hogar.

Si bien el vapor presenta efectos relajantes que resultan beneficiosos para la mente (al igual que los presenta el uso y disfrute de los jacuzzis para exteriores), imagina todo lo que pueden hacer por tu cuerpo: se encargan de limpiar la piel, despejar las vías respiratorias y hasta mejorar la circulación sanguínea.

Sin embargo, la sauna húmeda no se recomienda para todas las personas, pues no todos resisten las altas temperaturas ni se manejan bien con los niveles de humedad, por lo que tienes que estar seguro de que puedes usarlo con normalidad.

Pero no todo tiene que sonar fatal, la realidad es que los beneficios que puede regalar a nuestra salud son sencillamente excepcionales y se pueden comparar con los resultados que obtenemos al asistir a centros de saunas profesionales.

 Pero, ¿qué beneficios trae el baño turco hammam para la salud?

 Sin duda conocer cómo favorece el baño turco hammam a nuestro organismo, es indispensable para saber si debes o no tomarlo. A continuación analizaremos cada una de estas cualidades.

1. Ayuda a mejorar la respiración

El tiempo que dures dentro de la sauna hammam es especial debido a que facilita la apertura de las vías respiratorias, permitiendo que los pulmones puedan drenar la mucosidad.

Es ideal para personas con afecciones pulmonares leves, que por lo general presentan problemas al estar en climas secos o muy fríos. El vapor de los hammam es perfecto porque proporciona un alivio inmediato.

2. Es menos estresante

A diferencia de las saunas convencionales que utilizan calor seco, el baño turco usa el calor húmedo. Es en este punto donde radica la diferencia, pues la sauna produce que la presión arterial baje, mientras que en el baño a vapor no sucede de esta manera.

3. Puede relajar el sistema nervioso

Ayuda a relajar todo lo que tiene que ver con la ansiedad y el estrés, algo que lamentablemente forma parte de nuestra vida moderna. Se ha determinado que la exposición prolongada del vapor crea en las terminaciones nerviosas un estado de quietud y calma, a diferencia de las tensiones generadas por la angustia.

Gracias a que el hammam tiene efectos notables en tu piel y rostro, es capaz de ayudar a mejorar la autoestima de las personas, lo que reportará en un gran beneficio si sufres de depresión o ansiedad generalizada.

4. Piel perfecta

El vapor permite que los poros de la piel se dilaten, ayudando a liberar toxinas e impurezas que muchas veces son causantes del acné en el rostro. Esta reacción te ayuda a mantener una piel perfecta y libre de puntos negros, pues la profundidad de la limpieza es instantánea.

Al final, podrás ahorrarte algo de dinero asistiendo a costosos spas y limpiezas faciales. No obstante, esta acción no solo se genera en el rostro sino en toda tu piel.

5. Retrasa el envejecimiento

Debido a que la sauna de vapor le brinda mayor oxigenación a la piel, es posible retrasar las primeras apariciones del envejecimiento prematuro. Provoca que la piel pueda producir su elasticidad natural y así evita la oxidación de las células.

Además, puedes revitalizar el tejido y mejorar mucho la apariencia de las arrugas que se forman en la boca o en los párpados.

6. Alivia dolores asociados con la artritis

El vapor funciona como una especie de analgésico capaz de aliviar el dolor, gracias a la capacidad que tiene de aumentar el flujo de la sangre. Es por esto que puede socorrer de manera eficaz la inflamación de artritis utilizando el calor como tratamiento, aunque no suele recomendarse a personas que puedan agravar sus síntomas a causa de la humedad (tal y como es el caso de la artritis reumatoide grave).

7. Ayuda a los genitales

Promueve la secreción en el flujo vaginal, permitiendo una limpieza de forma natural, por si fuera poco, el calor ayuda a aliviar el dolor causado por la menstruación.

Para las mujeres es ideal, pues ayuda a regular los ciclos menstruales, y a disminuir los síntomas de la menopausia.

8. Te permite controlar el insomnio

Así es, el baño turco hammam facilita el descanso y te ayuda a conciliar el sueño de forma eficaz. Sus efectos relajantes permiten que tu cuerpo baje la tensión y te permite dormir profundamente.

9. Acelera el metabolismo

A diferencia de la sauna seca que solo te ayuda a sudar, pero no a perder grasa, el baño turco acelera el metabolismo lo cual permite que liberemos la grasa y que bajemos de peso poco a poco mientras liberamos toxinas.

No cabe duda que estos baños con vapor de verdad son capaces de ayudar a nuestro organismo a sentirse revitalizado. Sin embargo existen ciertas precauciones que debes entender antes de adentrarte en un aparato e estas características. Veamos cuáles son:

Precauciones antes de usar un baño turco hammam

 Si bien los baños turcos permiten que nos relajemos y que dejemos pasar el estrés del día, debes tener en cuenta que el ritmo cardíaco puede duplicarse debido a la temperatura.

No es recomendado para aquellas personas que padezcan problemas cardiovasculares o adultos mayores. Otra cosa que se debe considerar es que utilizado en exceso es perjudicial para mujeres embarazadas.

¿Qué tipo de baño turco hammam debo instalar en casa?

Aunque de momento parezca algo complicado, la verdad es que llevar una sauna turca hasta nuestros hogares no es cosa del otro mundo. En el pasado teníamos que viajar para poder vivir esta maravillosa experiencia, pero los tiempos han cambiado y ahora todo es posible.

Lo primero que debes de tener en cuenta es que necesitas un espacio de varios metros cuadrados para realizar la adaptación. Toma en consideración que la idea es que este resulte cómodo y puedes disponer de este espacio en un rincón de tu propio baño.

Lo ideal es que dejes el espacio o ranura por donde el vapor va a entrar, y que dentro de este contenedor pueda permanecer sin fugas. Recuerda que la función es la siguiente: primero debes lograr un ambiente tibio, luego empezar a disfrutar de los beneficios del vapor, del calor y de la humedad para finalmente tomar una ducha fría.

No dejes pasar por alto la electricidad que debe estar cerca del espacio que vayas a utilizar para el baño turco hammam, del mismo modo también las tuberías de agua y desagüe.

Generalmente el espacio o cabina debe poseer un cierre hermético para que dentro pueda conservarse el vapor. Por este motivo es recomendable utilizar puertas de vidrio que puedan abrir de afuera hacia adentro.

Ahora bien, tienes que instalar generadores de vapor, para poder lograr el efecto húmedo que necesitas crear dentro de la cabina. Además, esta tiene que poseer asientos para recostarte de forma cómoda.

Respecto al diseño del interior, puedes ayudarte de algunos ornamentos que hagan del espacio un santuario para tu tranquilidad y relajación. Algunas personas optan por incluir vegetación, sobre todo aquella que ayuda a oxigenar los ambientes.

También puedes incluir un sistema de luces inteligentes en diferentes colores para tu deleite. Sin duda hará que el lugar resulte muy moderno y sofisticado. Además, la iluminación puede interferir en mejorar tu estado de ánimo.

Por otra parte, algunas personas optan por humanizar sus espacios y en especial su cabina turca, colocando su música preferida y aromatizando el lugar. Al final sentirás que estás en un verdadero retiro espiritual con todas estas ideas.

Conclusión acerca del baño turco hammam

Los baños turcos no solo representan un momento de relajación profunda, también puedes compartirlos con otras personas mientras aprovechas el momento para disfrutar de todos sus beneficios.

Además, puede ayudar al metabolismo, calmar el dolor y servir como ayuda terapéutica para el estrés y la depresión. Las maravillas del baño húmedo se llevan utilizando desde mucho tiempo atrás, y desde entonces ya se sabía todas las ventajas que producía en el organismo.

Su principal cualidad es que no tienes que estar limitado a sesiones, a diferencia de las saunas donde no puedes abusar del tiempo.

Asimismo, permite que tu piel se rejuvenezca y que libere todas las toxinas, con la única finalidad de lucir maravillosa y de aspecto sano. Del mismo modo, colabora con la conciliación del sueño permitiéndote un descanso más natural y duradero.

Pero lo mejor está en que puedes tener todos estos beneficios y más al alcance de tus manos y en la comodidad de tu hogar. Con adquirir una de estas cabinas, será posible que crees el espacio perfecto para ti y tu salud.

Finalmente, es recomendable que siempre verifiques las precauciones y consejos antes de entrar a un baño turco, pues si bien es muy bueno para muchos, también puede ser perjudicial para personas con enfermedades del corazón o una edad muy avanzada.

 Es así como los baños turcos se han mantenido por generaciones, brindándonos muchos favores estéticos y de belleza. Es muy popular entre hombres y mujeres y puede ser la solución a tu falta de tiempo para asistir a un spa.

Por: Web del Hidromasaje