Aprende a elegir entre cabina hidromasaje y bañera hidromasaje ¿Cuál es lo mejor para tu baño?
Las renovaciones dentro de nuestro hogar siempre serán necesarias por un tema de funcionalidad, mejoras o simplemente porque nos hemos cansado de determinado aspecto que tenga alguna estancia.
Y cuando hablamos de redecorar, la toma de decisiones se vuelve prácticamente insoportable porque muchas veces nos cuesta determinar cuáles son las opciones más viables, rentables y duraderas.
Pero cuando se trata del baño turco, las alternativas se maximizan y entramos en un dilema sobre lo que necesitamos, lo que nos conviene y qué piezas se adaptan mejor a nuestro concepto.
¿Si te toca decidir entre ducha y bañera, cuál elegirías? De plano no es fácil dar una respuesta a tal cuestionamiento, por lo que queremos encaminarte por la alternativa que se adapte más a tu proyecto.
Estas piezas están asociadas a dos características esenciales.
La bañera (o bañera hidromasaje) se toma como punto de referencia a la elegancia y a la funcionalidad en los baños. Se trata de una pieza que aporta un aspecto lujoso y que te brinda comodidad al momento del aseo.
Por su parte, la ducha (o cabina hidromasaje) es asociada a la accesibilidad que tienes hacia el cuarto de baño, sin contar con todo el espacio que te queda para colocar otros accesorios o piezas que te aportan un toque extra.
¿Por qué muchos prefieren las bañeras?
Aunque muchos no lo saben, las bañeras tienen un pasado amplísimo que se remonta al año 1700aC. No se trataba de un elemento de aseo exclusivo de determinados grupos sociales sino una pieza infaltable en cualquier hogar.
Es precisamente el punto de la comodidad y del estilismo el que le sigue dando una enorme ventaja a la bañera sobre la ducha. Pero como todo, es cuestión de evaluar los gustos y las posibilidades.
¿Y las duchas?
Aunque mucho se habla de lo antiguo de las bañeras, es un error pensar que sean dispositivos “modernos”. Realmente se tiene conocimiento de que la sociedad egipcia hacía uso de este tipo de artículo.
Por supuesto, te hablamos de duchas que eran totalmente caseras y que se empleaban de forma rudimentaria para regular la presión del agua al momento de asearse las personas de esa época.
De cualquier modo, la funcionalidad de las que hoy existen también se lleva gran parte de la admiración y preferencia de quienes buscan baños turcos que sean espaciosos. Incluso, buscan en duchas formas de relajación y masaje terapia.
Es cuestión de espacio…
Lo hemos repetido muchas veces pero es momento de ponerle en perspectiva. Desde luego, cada quien conoce su rincón de la casa y cuáles son las aspiraciones que desea tener para con esa habitación.
Las bañeras vienen en diferentes tamaños y es algo en lo que primero debes pensar. No descartes la posibilidad sólo porque ya tengas la idea de que son siempre piezas gigantescas que de entrada ni entrarán por la puerta principal.
Y la variedad de las bañeras es tan pero tan amplia que incluso hay modelos que se ajustan a los rincones o a las esquinas, por lo que es sólo cuestión de buscar y dejarse asesorar por expertos en esta materia.
Los baños con bañera siempre lucirán más pequeños. Y aunque no pienses en cosas tan mínimas, las personas que se sienten atrapadas o demasiado ansiosas en espacios reducidos no verán del todo agradable una bañera en su cuarto de baño.
En el caso de las duchas, la amplitud es una de sus virtudes porque se instalan en un espacio que está diseñado para tu entera movilidad y disfrute. Y como el caso anterior, en el mercado se comercializan en diferentes modelos, como las dobles o esquineras, por ejemplo.
Las casas que las diseñan piensan en el mínimo detalle, por lo que las puedes conseguir de cualquier material antioxidante, que no se quiebre, que regule la cantidad de agua, e incluso que incorpore un calentador del agua que utilizarás de manera frecuente.
Lo estético también cuenta
Nuevamente tenemos un aspecto en el que podemos comparar ambas alternativas, pero serán más bien tus preferencias y necesidades las que a fin de cuentas se impondrán. ¿Podría ser una de estas opciones más estética que la otra?
Si hablamos de las bañeras, ya de por sí tienen un punto extra por encima de su “competidora”. Las que se comercializan como el modelo “exento” son de altísima belleza y le aportan un detalle delicado y hermoso a los baños turcos.
Las bañeras que son fabricadas con la funcionalidad de hidromasaje son muy vistosas, pero además de lo evidente, aportan ese plus de caché que no está demás sentir que se tiene. Después de todo trabajamos para darnos nuestros lujos ¿o no?
¿Y si te dijéramos que las duchas tienen su toque chic que no puedes dejar de tener en cuenta? Existe la falsa creencia de que pueden hacer al baño como un espacio básico, barato y sin personalidad pero eso está muy lejos de la realidad.
Hay duchas que incorporan cabinas de hidromasaje revestidas, que incorporan platos a la medida y que hacen de todo el conjunto una maravilla ante los ojos. Nuevamente, es cuestión de ver todas las alternativas que hay para cada uno de nosotros.
¿Cuál es más funcional?
Para gustos, hay colores. O al menos es eso de lo que se trata el amplio mercado de las bañeras y las duchas, por lo que deberías buscar y rebuscar entre las múltiples opciones existentes y escoger la alternativa que más y mejor encaje en tu proyecto.
Las duchas tienden a ganar en este terreno porque te da mucho espacio para jugar, combinar, incorporar y volver a reformar. Pueden cambiar los platos donde sale el agua, hay otras que te permiten instalar extensiones para evitar caídas. El punto más clave y que a muchos les interesará, es que se pueden limpiar con mucha más facilidad.
La funcionalidad no es el fuerte de las bañeras; incluso son consideradas peligrosas, sobre todo si hay personas mayores o niños pequeños en la casa que pueden estar en constante contacto con esta pieza de los baños turcos.
Pero aunque se vean como un riesgo para los pequeños de la casa, estos adoran tomar su baño en una bañera, por lo que no es descartable del todo. Si se trata de limpieza, ahí sí tendrás un poco más de problemas porque no son tan sencillas de asear.