Bañera de hidromasaje, un mundo de posibilidades
La bañera de hidromasaje es un lujo que no cualquiera puede permitirse, la fantasía de cualquier persona que algún día haya llegado cansada a su casa en busca de un momento de relajación. Tener un producto de este tipo en casa es prácticamente lo mismo que tener un spa balneario, una inversión perfecta para aquellas personas que tienen una rutina ajetreada y llegan a sus casas con el expreso pensamiento de descansar.
Las bañeras jacuzzi constan de una estructura (vaso) sobre el cual se perforan una gran cantidad de agujeros en los que instalar inyectores para masajear el cuerpo. Tras esos inyectores se ubican sendas tuberías que conectan con una o varias bombas encargadas de impulsar el agua con potencia, logrando el efecto masajeador deseado.
Obviamente hablamos de los chorros de agua propulsada, ya que gracias a la potencia de las bombas es posible diversificar el masaje hacia una gran cantidad de zonas. La exposición a estos chorros de agua propulsada funciona como hidroterapia, puesto que reduce la presión arterial, favorece la circulación de la sangre y da un masaje en los músculos con los que entre en contacto.
El servicio básico de hidromasaje se consigue mediante la constante rotación del agua por medio del motor y las diferentes intensidades del chorro. Puede traer consigo otras funciones como un sistema de inducción de fragancias para proveer un tratamiento de aromaterapia en el agua, así como extras que desinfectan en agua de manera eficaz (como la desinfección por ozono) u opciones de mantenimiento térmico, al objeto de disfrutar de una temperatura constante por un largo periodo de tiempo.
Características y accesorios para explorar
Existen muchos modelos distintos entre ellos, ya que obviamente la idea es que cada persona encuentre su producto ideal. Para explicar más a fondo tomaremos como ejemplo uno de los modelos disponibles, la Bañera hidromasaje Jacuzzi AT-001-1.
Como podemos ver en sus detalles posee dimensiones de 1500 x 830 x 620 mm y está pensado para una capacidad de 1 persona. Estas dos características, tamaño y capacidad, conforman los dos aspectos más relevantes de cada modelo de jacuzzi.
Podemos ver además el número de jets, que es 17, ¿Qué son los jets? Son por decirlo así los “propulsores”, los que se encargan de hacer el trabajo de hidroterapia y generar esos chorros de agua propulsada que tanto bien traen a la salud. El número de jets viene determinado por el tamaño de la bañera aunque puede variar también por la potencia en la bomba, asique es posible encontrar otros modelos del mismo tamaño pero con un diferente número de jets.
Si miramos otro modelo como es el AT-002, podemos ver que posee 19 jets, que cuenta con 1 bomba de hidromasaje, una bomba de aire y por ultimo un calefactor de 1500W, con un tamaño de 1500 x 1000 x 650 mm, aproximado al anterior ejemplo y muestra de que el número de jets varía entre modelos. Y de la misma forma puede haber otros añadidos, como un número de reposacabezas, número de luces. etc.
Las bañeras con hidromasajes son usadas en interiores y generalmente se tiende a elegir aquellas que ocupen menos espacio, intentando de este modo aprovechar al máximo todos los rincones del cuarto de baño; aunque esto puede depender del caso ya que la persona puede tener una habitación entera exclusivamente para la bañera o solo tener un pequeño espacio reducido.
Las bañeras para exterior no son muy usadas puesto que lo normal es mantener tu bañera en el espacio del baño. Aunque de igual forma no falta la persona que pueda tener la idea de tener un spa de exterior en un cuarto de baño, pues en aquellos escenarios en que el producto vaya a ser usado por más de 2 personas a la vez la forma de llevar a cabo el proyecto debe contemplar necesariamente la adquisición de un spa exterior.
El mantenimiento del agua
El agua debe ser reemplazada tras cada uso, pues las bañeras hidromasaje no disponen de sistemas de filtración avanzada para la depuración del líquido. Si bien el ozonador alarga la vida de ésta, no es recomendable reutilizar el agua por demasiadas veces.
En caso de utilizar una bañera de hidromasaje en un exterior siempre hay que tener en cuenta todos los residuos que pueden caer al agua con el simple pasar del tiempo. Nunca se sabe lo que el viento trae consigo.
Beneficios y más
Las bañeras de hidromasaje ejercen un trabajo de hidroterapia a distintas partes del cuerpo, dependiendo de cuál sea la que está entrando en contacto con los chorros de agua propulsados. Entre sus beneficios podemos encontrar la prevención de lesiones, mejora de la circulación sanguínea, relajación de los músculos y por último liberación de la tensión física e incluso emocional. Esto es además especialmente útil para las personas que practican deportes exigentes o que sufren de artritis.
La forma más efectiva de utilizar la bañera es colocar el cuerpo de tal forma que reciba los chorros de agua directamente en las áreas que se quieren tratar. Por ejemplo si se sufre de un dolor de espalda la idea es colocar la espalda de tal forma que reciba los chorros justo en la zona dolorida. Depende de la persona elegir la intensidad, esto según el tratamiento que sea el deseado; mientras más fuerte sea la intensidad el masaje desbloquea más tejidos, alivia tensiones más trabajadas y en general mejora los efectos drásticamente, aunque no hay que abusar de la potencia en exceso.
Una parte del cuerpo que puede ser afectada positivamente en mayor medida es el área de los pies, ya que los chorros de agua permiten someterlos a una sesión de reflexología. Esto no solo es agradable si no que proporciona una mejora en su salud, debido al hecho de que los pies contienen una gran cantidad de terminaciones nerviosas.
En definitiva, la adquisición y disfrute de un hidromasaje ofrece una experiencia múltiple y placentera, ya que permite a la persona tomar un descanso mientras habla con otras personas o simplemente disfruta de un momento de soledad.