Cómo la piscina de hidromasaje te ayuda a perder peso
Cuando vamos a adquirir una piscina de hidromasaje lo primero en que pensamos es en la rutina de ejercicios y cómo influirá para alcanzar varios objetivos específicos como son el aumento del volumen muscular, mantener el cuerpo relajado, liberar tensiones, y muy especialmente, ayudar a perder peso.
Existe una gran cantidad de estudios y experimentos que han demostrado de forma recurrente que la presión y densidad ejercida por el agua caliente sobre nuestro cuerpo dentro de una piscina de hidromasaje es un aliciente magnífico.
Al igual que ocurre con las bañeras hidromasaje, acaba con los dolores y fatigas, moldea la figura, activa la circulación sanguínea y mejora el ánimo, pero en ocasiones olvidamos la ayuda que ofrece sobre la pérdida de peso.
Se trata de una combinación beneficiosa de eventos que son claves para mantenernos sanos, que incluyen ganar masa muscular, mantener el cuerpo a tono y sin tensiones musculares, reducir drásticamente el estrés y mejorar nuestro estado anímico para reducir el peso.
¿Pero exactamente cómo es posible y cuáles son los secretos para lograrlo? A continuación, te ofreceremos una guía indicativa de cómo la piscina de hidromasaje te ayuda a perder peso.
El peligro de la celulitis y la retención de líquido
Uno de los principales riesgos al llevar un tren de vida sedentario, rígido, rutinario y estresante, es sufrir la temida retención de líquidos y la posterior generación de celulitis.
Además del sedentarismo y el estrés, los factores que causan la retención de líquidos suelen ser una mala alimentación que a su vez provoca una mala circulación sanguínea.
La falta de una adecuada circulación de la sangre impide que se absorba de manera adecuada los líquidos corporales, generando hinchazón en las extremidades.
Si no se trata adecuadamente el problema de la circulación sanguínea, este exceso de líquido en las extremidades inferiores va aumentando progresivamente superando fácilmente los 3 kilos de peso.
Otro factor que nos indica que nuestro organismo no está bien es la aparición de celulitis y su característica “piel de naranja”, sobre todo en los glúteos y sus alrededores.
Al contrario de lo que se cree, la celulitis no es un simple problema estético, se trata de una infección dérmica de origen bacteriano que suele ser muy común en las mujeres que, además de la característica piel esponjosa, presenta inflamación, enrojecimiento y dolor en la zona afectada y de propagarse puede generar graves problemas de salud.
Si bien se tratan de dos dolencias distintas, tanto la retención de líquidos como la celulitis presentan causas idénticas y la solución es igual en ambas: la reactivación de la circulación linfática y sanguínea para eliminar el exceso de líquido y de las grasas acumuladas en nuestra piel.
Para ello también es indispensable estimular nuestro metabolismo activando el sistema endocrino para que aumente la proporción de oxígeno y nutrientes en la sangre, irrigue de manera efectiva las células mediante el torrente sanguíneo y así desintoxicar venas y arterias que evitarán la retención de líquidos y la formación de grasas.
No es algo milagroso ni es instantáneo
Con el uso continuo de la piscina de hidromasaje disminuye el estrés y la tensión acumulada, se mejora la calidad del sueño, se liberan las toxinas del cuerpo y se limpia la piel ya que el agua caliente actúa como un drenaje linfático que estimula al organismo ayudando a disminuir de manera efectiva la retención de líquido y la producción de celulitis.
La primera impresión que nos da es que pareciera tratarse de algo mágico en donde la persona se introduce en la piscina de hidromasaje y listo, el problema se arregló. Pero como todo en la vida no es algo milagroso y requiere de constancia y disciplina llevando a cabo una batería de ejercicios diarios.
Para empezar, es imprescindible que la persona cambie sus hábitos alimenticios, comience a balancear de manera adecuada su dieta y, aunque suene tremendamente absurdo y contraproducente, consumir mucha agua. Una vez hecho esto, la “milagrosa” piscina de hidromasaje entrará en acción.
Cómo la piscina de hidromasaje te ayuda a perder peso
La piscina de hidromasaje ofrece varias maneras muy efectivas de hacer ejercicio y mantener el cuerpo a tono y en el peso ideal.
- Natación
La primera opción es la más tradicional y es la natación. El diseño de una piscina de hidromasaje está hecho para que el usuario nade dentro de la cabina manteniendo siempre la misma ubicación estática mediante el bombeo constante de chorros de agua caliente genera una fuerte fuerza que le impiden avanzar.
La natación es un ejercicio muy completo que pone en funcionamiento todos los músculos del cuerpo dentro de un ambiente de baja densidad, por lo que es ideal para perder peso.
Otra ventaja es que, si bien el estilo libre es el ideal para practicar dentro de una piscina de hidromasaje, otros estilos como mariposa o pecho también se pueden aplicar (siempre y cuando las dimensiones de la tina lo permitan), esto redunda en una mayor presión sobre el abdomen y las articulaciones inferiores.
- Yoga
A primera vista puede sonar extraño practicar yoga dentro de una piscina de hidromasaje, pero se trata de un ejercicio igual de completo porque se ejercita tanto la mente como el cuerpo en simultáneo.
El yoga es una disciplina que transmite paz interior, serenidad, relajación y una profunda concentración, pero al mismo tiempo desarrolla fuerza, mejora de forma notable el equilibrio, intensifica la flexibilidad y elasticidad y resulta en algo asombroso para quemar calorías, mejorar la digestión y desestresar la mente, el cuerpo y el espíritu.
Esto se debe a las singulares y desafiantes posturas que el usuario debe de hacer dentro de la tina mientras siente la presión de los chorros de agua que actúan como una fuerza que aumenta la dificultad, y por consiguiente, aumenta la fuerza.
Esto, aunado al hecho de que el yoga es un ejercicio donde la respiración profunda es algo vital, crea un ritmo y un tempo corporal idóneo para que la circulación sanguínea sea óptima y constante que redundará en múltiples aspectos positivos.
Además, la mayor densidad del agua junto con la sensación de flotabilidad es una combinación perfecta para aquellas personas con peso excesivo o con movilidad reducida ya que ayuda notablemente a las articulaciones y la elasticidad.
- Aerobic
Otra opción muy recomendada es practicar sesiones de aerobic dentro de la piscina de hidromasaje de la misma forma que se haría dentro de una piscina convencional.
La principal virtud de la práctica de los ejercicios aeróbicos es el aumento sostenido del ritmo cardíaco y la quema de calorías. Por lo general los ejercicios más comunes suelen ser las patadas de bicicleta, la extensión de piernas laterales, las prensas de muslo, los empujes de talón, la extensión de codos y los círculos de brazos.
Este tipo de ejercicios aumenta la flexibilidad y resistencia, además de que al hacerlo dentro del agua se evita una contractura inesperada, pero es muy importante tener mucho cuidado porque, aunque se esté dentro del agua, es indispensable hacer el calentamiento previo.
- Ejercicios de fuerza
Los ejercicios de fuerza en donde están involucradas las pesas suelen tener resultados simultáneos: tonifica el cuerpo, aumenta la masa muscular, incrementa el vigor y la resistencia y ayuda a perder peso.
Sin embargo, de todos los ejercicios es el que se debe de hacer con más cuidado e ir aumentando el peso poco a poco, es importante recordar que los chorros de agua caliente incrementan la resistencia y hay que tener cuidado con el impacto del golpe de calor.
Si se tienen en cuenta estas advertencias previas los resultados son espléndidos ya que la densidad del agua ayuda a prevenir calambres o torceduras y es perfecto para aquellas personas que presentan dificultad para hacer este tipo de ejercicio.
Es bueno iniciar con rondas suaves de mancuernas y barra para fortalecer bíceps, muslos, espaldas y el área de la cintura, después de un par de semanas cuando se haya agarrado el ritmo se puede ejercitar otros músculos con otra serie de ejercicios más completos y complejos.
Beneficios conjuntos para la pérdida de peso
Perder peso usando la piscina de hidromasaje promueve otra serie de beneficios que no se consiguen al hacerlos de manera convencional.
Para empezar los chorros de agua caliente ayudan a relajar la tensión muscular, alivia el dolor causado por el esfuerzo y la reactivación de la presión sanguínea actúa como un catalizador que libera hormonas importantes como la endorfina y serotonina, lo que produce una sensación instantánea de bienestar.
La densidad del agua también es perfecta para evitar el alto impacto que se sentiría practicando ejercicios en otra circunstancia y en otro ambiente.
Obviamente tampoco es una panacea; una vez se salga de la piscina de hidromasaje la persona experimentará dolor, pero en un grado mucho menor, al igual que la tensión y la fatiga serán mucho menor.
Al bajar de peso la persona también evitará sufrir de arterioesclerosis, artritis, arritmia cardíaca, diabetes, hipertensión, las enfermedades estomacales y reduce significativamente el riesgo de sufrir un infarto o ACV.