Cómo utilizar el jacuzzi exterior en niños
Tener un jacuzzi exterior en casa es una maravillosa idea para relajarte después de un día ajetreado, pasar un rato agradable contigo mismo o con tu pareja e incluso para divertirte en familia en el jardín o la terraza. Y no sólo para los grandes de la casa, sino también para los más pequeños.
Llegan del colegio, de jugar o de hacer las tareas y quieren disfrutar un rato en el agua; pues bien, mamá y papá les dan el permiso, sin embargo es muy importante tener en cuenta ciertas reglas en cuanto al uso de jacuzzis para los niños, ya que los menores no lo pueden utilizar del mismo modo que una persona mayor, sobre todo por cuestiones de seguridad.
Vigilarlos al usar el jacuzzi exterior
Para que un niño use el jacuzzi exterior instalado en el hogar, es de gran relevancia mantenerlo bajo la vigilancia de alguien responsable. El cuidado debe ser mayor al que le dan cuando juegan en el parque o corren por los pasillos de casa, pues ellos son más propensos a sufrir algún accidente debido a las características de estos elementos. Por lo tanto, desde que el chiquillo entre al jacuzzi hasta que sale, debe estar frente a los ojos de un adulto.
La duración adecuada
Otra importante norma es el tiempo. Quizás los niños refuten la medida y protesten porque su rato en el divertido baño se extienda, sin embargo, para los más jóvenes no debe prologarse más de 10 minutos el uso del jacuzzi exterior. Aunque parezca una duración demasiado corta, de esta forma es más seguro para ellos.
La temperatura correcta
Asimismo, la temperatura también deberá ser controlada para los niños. El agua muy caliente no es aconsejable, así que disminuye el calor por medio del panel de control si has decidido que tus hijos se sumerjan unos minutos.
No recomendado antes de los 5 años
Por otro lado, también es bastante importante saber a qué edad los menores pueden empezar a utilizar el jacuzzi exterior. Mientras no hayan cumplido los 5 años de edad ¡no los introduzcas en el jacuzzi! Ya que según las estipulaciones de la Cruz Roja, los niños tienen una temperatura corporal diferente a los adultos y su tolerancia también es distinta, por lo tanto deben tener la edad adecuada. Algunos expertos incluso recomiendan que sea mínimo a los 12 años.
Otras normas
En caso de tener una niña, una regla adecuada para prevenir cualquier tipo de accidente es que tenga su cabello recogido antes de acceder al jacuzzi. Nada de “melena suelta”, sobre todo si el largo de su pelo es significativo. Los niños suelen juguetear de aquí para allá y la melena podría quedarse atrapada en algún jet o boquilla del jacuzzi exterior con el consiguiente tirón que ello implicaría.
En cuanto a los varones, la ropa de baño que usen también debe ser considerada. No le coloques bañadores muy largos, lo recomendable es que utilicen trajes de baño pegados al cuerpo, por el mismo motivo que comentamos en el párrafo anterior.
Y aunque esto les parezca un poco aburrido a los pequeños, lo mejor es evitar juegos muy movidos. Cuando los niños están en una piscina o cualquier espacio acuático les encanta sumergirse, nadar, saltar e idear todo tipo de actividades divertidas, no obstante dentro del jacuzzi exterior es mejor evitarlas por seguridad. No les permitas sumergir la cabeza violentamente e incítalos a estar tranquilos en su rato de baño. Ya que están al exterior es mejor dejar la parte de los juegos al salir y disfrutar de los alrededores del jardín o patio.
Asimismo, como los jacuzzis poseen diferentes tipos de funciones, botones y efectos, debes estar muy pendiente de que los chicos no manipulen ninguna parte técnica de la máquina, no sólo por temor a que se pueda averiar sino que además pueden activar cambios que no sean muy recomendables para ellos, como el cambio de temperatura o el movimiento del agua.
Además, hablando de las funciones disponibles en los increíbles jacuzzis para exteriores, los movimientos del agua tipo olas o los juegos con espuma y burbujas también deben ser evitados, o en tal caso muy bien controlados por los adultos cuando los niños se encuentran en el interior del equipo.
Los chorros y desagües ubicados en el interior del jacuzzi igualmente pueden ser peligrosos, ya que los usan para jugar. Debes estar pendiente de que no introduzcan los dedos en tales orificios, además es una de las razones para evitar lo del cabello suelto, como ya se ha comentado anteriormente.
Lo mejor de todo, aunque les quieras dar su rato propio a tus hijos, es que al momento en que decidas que pueden utilizar el jacuzzi exterior los acompañes dentro del agua, sobre todo cuanto más pequeños sean de edad. Poco a poco, mientras vayan creciendo, puedes darles más libertades y oportunidades para que disfruten mejor de esta maravillosa pertenencia que puedes tener en el jardín o terraza de tu hogar.
En caso de que los niños no se encuentren utilizando el jacuzzi exterior pero sí estén jugando en los alrededores de donde se encuentre ubicado, evita mantenerlo encendido y si lo tienes lleno de agua para usarlo previamente coloca alguna tapa mientras no lo tengas en uso, pues si a los pequeños se les ocurre alguna idea traviesa puede terminar todo por los aires.
Ejercicios divertidos
Una de las mejores formas para que los chicos utilicen el jacuzzi exterior de manera correcta es que los enseñes y les promulgues una nueva forma de relación y ejercicios, los cuales pueden comprender yoga acuático, entrenamiento de respiración, estiramientos, etc. Todo esto los hará sentirse mejor y les ayudará a comprender la manera adecuada en la que debe ser utilizado un jacuzzi.
Conversa con tus pequeños y explícales de la mejor forma las reglas a la hora de utilizar el jacuzzi y las consecuencias que traería no hacerlo. Así, podrán tomar la conciencia suficiente para tener una buena conducta y la idea de haber colocado un jacuzzi exterior en tu hogar habrá resultado ser un auténtico acierto para todos los miembros de la familia.
Tener un jacuzzi exterior en casa es una idea increíble y puede ser maravillosa para que también tus niños la disfruten, pero siempre y cuando les permitas hacerlo bajo una serie de reglas para que no ocurra ningún hecho que te haga vivir momentos de angustia. Haz que tus pequeños se diviertan con total seguridad.